Mantener nuestra piel joven durante el mayor tiempo posible es el objetivo de la mayoría de las mujeres, intentando retrasar los signos de la edad en la piel. Para conseguirlo, contamos con productos cosméticos rejuvenecedores, alimentos que nos ayudan a conservar la juventud de nuestra piel o rutinas de belleza que también contribuyen a ella.
Pero si queremos que todo ello sea más efectivo, también es aconsejable seguir una serie de pautas que nos ayuden a evitar un envejecimiento prematuro de la misma, manteniéndola así suave e hidratada durante más tiempo:
– Utiliza siempre protector solar: El sol es uno de los factores que más inciden en el envejecimiento cutáneo. Por ello, tanto en verano como en invierno es necesario utilizar protección solar, así como hidratar convenientemente la piel después de tomar el sol durante un largo tiempo, para evitar la pérdida de agua que puede causar la aparición prematura de arrugas.
– Limpiar la piel todos los días: De este modo, mantendremos los poros limpios de suciedad y bacterias que los obstruyen, con lo que lograremos que la piel respire y se oxigene mejor. Esto es especialmente importante por la noche, ya que es mientras dormimos cuando las células cutáneas se regeneran, recuperándose así del desgaste sufrido durante el día.
– No fumar: Fumar implica la aparición prematura de arrugas, por el fruncimiento de los labios que hacemos cuando inhalamos el humo del cigarrillo y porque los productos contenidos en el humo de este, que nos alcanza la cara y los ojos oxidan la piel, envejeciéndola. Si no eres capaz de dejarlo, prueba a limitar el número de cigarrillos e incluye en tu dienta alimentos antioxidantes, como las frutas y las verduras, ricos en vitamina C, que te ayudarán a paliar los efectos del tabaco.