Si tienes caspa no te preocupes, es un problema muy común. Según unos recientes estudios una de cada dos personas tiene o ha tenido caspa, como puedes ver es un problema muy común que no hace falta llevar como un secreto o como una desgracias. La piel de nuestro cuerpo se va regenerando cada 28 días, aproximadamente, así que la caspa es esa piel muerta del cuero cabelludo.
Nuestro cuero cabelludo es el hogar de una especie de hongo llamado malassezia. Este pequeño hongo se alimenta del aceite producido por los folículos pilosos de nuestro cuero cabelludo. La caspa se produce cuando, por alguna razón, el hongo malassezia se irrita provocando que la piel muerta se pierda de manera mucho más rápida y evidente. Así, en lugar de perder esas células muertas del cuero cabelludo a lo lardo de esos 28 días, se pierden cada pocos días. Este hongo se sigue investigando hoy en día.
La caspa puede ser un problema muy embarazoso, pero con el debido cuidado del cabello, la reaparición puede ser controlada. La mejor manera de mantenerla a raya es utilizar un champú para el cabello todos los días y especialmente preparado para luchar contra la caspa. Puedes buscar champús anticaspa con piridina de zinc, sulfuro de selenio, ácido salicílico o ketoconazol como principios activos.
Para obtener resultados óptimos, deberás aplicar el champú dos veces durante el mismo lavado: durante el primer lavado se quitarán los restos de pieles muertas y la acumulación de aceite, y durante el segundo lavado debes mantener una par de minutos el champú en tu cabeza para que el cuero cabelludo absorba los componentes del champú. Un buen remedio casero es la utilización del vinagre. Cuando te laves la cabeza échate un chorreoncito de vinagre y extiéndelo con un buen masaje por tu cabeza. Recuerda que debes aclarar bien tu pelo para no oler a vinagre.