Eliminar o reducir la celulitis no siempre resulta fácil, y la mayor o menor dificultad está relacionada, en muchos casos, con el tipo de celulitis que sufrimos. Una de las que más fáciles resulta de eliminar es la celulitis blanda o celulitis infiltrada de tipo A.
Este tipo de celulitis se da en las mujeres que sufren retención de líquidos, y también suele aparecer cuando perdemos peso muy rápidamente, con lo cual el cuerpo no tiene tiempo de adaptarse a su nuevo peso, lo que hace que la piel se quede inflamada y llena de líquido.
Se trata de la celulitis más visible y que más centímetros suele proporcionar a nuestra silueta, es blanda al tacto y no es dolorosa, al contrario de lo que sucede cuando existen nódulos de celulitis, lo que indica que está ya endurecida y resulta mucho más difícil de eliminar, requiriendo habitualmente algún tratamiento estético para librarnos de ella.
En el caso de la celulitis blanda, es muy importante beber suficiente líquido, unos dos litros al día, para así reducir la retención de líquidos. No es conveniente tomar diuréticos, ya que puede haber efecto rebote e hincharnos más cuando dejemos de tomarlos. Tomando agua, infusiones y zumos, lograremos eliminar líquidos y toxinas al mismo tiempo.
El ejercicio también resulta imprescindible, específicamente en las zonas donde se acumula la celulitis, que suelen ser los muslos y los brazos, especialmente la zona del tríceps. Con 20 ó 30 minutos al día y un poco de constancia lograremos recuperar nuestra figura.
Finalmente, presta también atención a la alimentación, limitando el consumo de sal, aunque sin eliminarla nunca de la dieta, así como los productos ricos en grasas, como bollería, fritos, etc. Consume legumbres, pescados azules, frutas y verduras y de ese modo ayudarás a que se elimine la celulitis más rápidamente.