La espalda es una de las zonas más sensuales de una mujer y que también se luce más cuando hay que ponerse el bikini o bien algún vestido más escotado para un evento especial. No obstante, también en el día a día se deja ver algo más con camisetas o camisas diseñadas para poner el foco de atención en esta parte del cuerpo. Y no hay que tener miedo a lucirlas ni a renunciar a estas prendas porque conseguir que la espalda tenga su tono adecuado y que sea más esbelta se logra con unos ejercicios que te proponemos y que son realmente muy sencillos de hacer.
Los ejercicios
Todos los ejercicios de los que vamos a hablar se pueden hacer en casa a la perfección. Como siempre, necesitas llevar ropa cómoda para realizar los movimientos sin problemas. En esta ocasión, también se precisa de una silla de respaldo alto y de una goma elástica.
El primer ejercicio consiste en ponerse de pie al lado de la silla con una mano apoyada en su respaldo. En esta posición, hay que hacer una respiración honda y mantener durante unos segundos la espalda totalmente recta y con los hombros hacia atrás mientras se aguanta el aire. A continuación, hay que volver a la posición inicial al mismo tiempo que se va espirando.
El siguiente ejercicio también es muy sencillo. Lo primero que hay que hacer es ponerse de pie frente a la silla, de manera que delante tengamos su respaldo. Luego, hay que doblar el torso por la cintura dejando la espalda y el cuerpo en un ángulo recto. Las manos quedan apoyadas en el respaldo de la silla. Esta posición se tiene que mantener durante unos segundos para después regresar a la postura inicial.
Finalmente, el último ejercicio que proponemos consiste en coger la goma elástica y pasarla por las patas de la silla. A continuación tienes que sentarte en el suelo con las piernas estiradas y la espalda bien recta, formando nuevamente una “L” o ángulo de 90 grados. Coge los extremos de las gomas, pega los brazos al cuerpo y tira de la goma mientras llevas los codos hacia atrás. Luego vuelve a la postura inicial.
Cada movimiento de cada ejercicio hay que repetirlo un mínimo de 15 veces. Con constancia, verás que la espalda mejora significativamente.