Adelgazar es, casi siempre, un proceso lento, sobre todo si lo queremos hacer de forma sana para que nuestra salud no se resienta tras una dieta. Según los médicos, lo aconsejable es perder medio kilo a la semana, para que nuestro cuerpo se vaya acostumbrando a la pérdida de peso. Sin embargo, hay veces que necesitamos perder peso un poco más rápido, sobre todo en las fases de estancamiento de la dieta, donde nos sentimos tentadas a tirar la toalla. Por ello te damos unos trucos para acelerar la pérdida de peso, pero, eso sí, olvídate de los medicamentos a no ser que te los recete tu médico.
– Té verde: Tomar una infusión de té verde 4 o 5 veces al día es perfecta para bajar el nivel de grasa. Si no te agrada el té, también puedes tomarlo en capsulas de fitoterapia. Tomar té verde es mucho más efectivo que tomar litros de café al día y tiene menos efectos secundarios.
– Zumos de frutas: La papaya y la piña son frutas que ayudan a quemar las grasas más rápidamente. Para prepararte un zumo sólo tienes que licuar media taza de papaya picada sin cáscara y un cuarto de taza de piña cortada. Añádele un vaso y medio de agua y tendrás un zumo adelgazante lleno de vitaminas.
L-Carnitina: La L-Carnitina es un producto que se vende en farmacias y sirve como complemento para acelerar el metabolismo de las grasas. Ayuda a quemar grasa y a aumentar la masa muscular pero, eso sí, no te valdrá de nada si no haces ejercicio, así que, ponte las zapatillas y sal a caminar. Lo notarás en la báscula.
Alimentos: Entre los alimentos que ayudan a quemar grasas más rápidamente, tenemos, el ajo, el pomelo, las espinacas, la calabaza y los pepinos.