Seguramente, si echas un vistazo a tu neceser de cosméticos descubrirás que tienes un montón de barras de labios pero que siempre terminas utilizando la misma. Esto se debe a que, al maquillarnos, descubrimos que tal o cual color no nos queda bien.

Debemos tener en cuenta el color de nuestra piel cuando compremos una barra de labios. Todas deseamos llevar un color atrevido, pero quizá no estamos muy seguras de cual es ese color que resultará absolutamente impactante en nuestra boca. Si a esto añadimos la luz artifical de las tiendas y la enorme cantidad de sombras generadas por los productos, el proceso de conseguir ese color ideal puede verse frustrado.

Ten en cuenta que los colores del maquillaje deben complementar el tono de tu piel. Por ello, a las personas con piel oscura les favorecen de los colores profundos y fríos como el color vino. En estas pieles hay que evitar los tonos amarillos porque básicamente no son complemento sino se fusionan con tu tono.

Ten en cuenta que debes comprar los colores que te quedan bien a ti, no los que parecen más bonitos en la tienda o en el rostro de la actriz de moda. Para evitar problemas y acertar con la elección, si puedes, debes ver el color con luz natural.

Hay rojos para todas las tonalidades, si tu piel tiene tendencia rosada usa un rojo claro que tienda al naranja. Si tu piel tiene tonalidad oscura usa un rojo oscuro.

Otro aspecto importante es la moda. Para ir a la moda fíjate en las revistas y en la televisión, observa los colores de labios que las actrices y modelos están usando y también analiza si los labios son brillantes o mate. Así mismo, fíjate cómo los labios contrastan con las mejillas y las sombras de ojos. Mirando y observando aprenderás muchos trucos.

No hay nada más irresistible que unos labios pintados en tonos rojos o rosados, o, simplemente, bañados con un brillo labial. Pero para lograr los mejores resultados al maquillarnos esa parte del rostro, es mejor seguir los consejos y trucos que te ofrecemos:

– Mantén siempre hidratados los labios. Es importante que, después de limpiarte el cutis, bien por la mañana o antes de acostarte, apliques manteca de cacao para mantenerlos humedecidos. Si tu piel es muy sensible, utiliza protectores solares especiales para esta zona. Una buena forma de mantenerlos siempre hidratados es aplicar un poco de crema de día en los labios cuando nos la apliquemos en el resto del rostro. De este modo evitarás que se te agrieten o incluso te sangren, sobre todo en lugares donde el clima es muy duro en invierno o si disfrutas del deporte del esquí en invierno.

– Cuando empieces a maquillarte, ponte base en los labios tal como lo haces en todo tu rostro. Unifica el color y después resalta tu boca aplicando el lápiz de labios por encima. Esto no sólo ayuda a definir mejor el contorno labial sino que permite que la barra se adhiera mejor a los labios gracias a la base aplicada.

– Para darle volumen a tu boca, primero pasa un algodón impregnado en cream limpiadora por los labios, ya que es importante que no queden restos de maquillaje. Después coge un cepillo de dientes seco y frótalo firmemente sobre tus labios, lo que provocará que la circulación se reactive y tus labios ofrezcan el efecto voluminizador que deseas.

– Cuando elijas una barra de labios, trata de que sea hipoalergénica para proteger al máximo tu piel y que, al mismo tiempo sea hidratante.

Si queremos conseguir unos labios perfectos, un toque indispensable es el delineado de labios. El delineador nos sirve para resltar los bordes de los labios y afinarlos o darles más volumen, según nuestras preferencias. Además, nos ayuda a evitar que la barra de labios se salga del contorno de los labios.

Antes de emprezar, es importante que el delineador esté convenientemente afilado. En cuanto al color, elegiremos un lápiz que sea del mismo tono que la barra de labios que vayamos a utilizar o un lápiz del color de nuestra piel.

Para delinear los labios comenzaremos siempre desde el corazón del labio superior (el centro del labio) hacia el lado de las comisuras. Una vez hayamos delineado el labio superior, aprieta firmemente los labios de forma que quede una huella del lápiz en el labio inferior. Siguiéndola, conseguirás una boca perfecta.

Una vez realizado esto, sólo nos queda pintarnos los labios por dentro del delineado utilizando un pincel.

Si tienes pequeñas arruguitas que bordean tu boca, para disimularlas sólo tienes que aplicar una pequeña cantidad de corrector de ojeras y extenderlo hasta que se funda con el color de tu piel.

– Labios delgados: Delínealos por encima de la línea natural del labio, ensanchando la parte del centro del labio superior, el inferior o ambos, según cuál de los dos seá más fino o los dos. Hazlo siempre de manera que ambos labios queden armónicos.

– Labios grandes: Si quieres afinarlos un poco, borra la línea natural de los labios con una pequeña cantidad de corrector y con el delineador crea una pequeña línea que parezca natural.

– Labios pequeños: Delíenalos por fuera del contorno de los labios, extendiéndolos hacia los laterasles llegando hasta las comisuras.

– Si tienes las comisuras caídas, delinéalos llevándolos ligeramente hacia arriba una vez que llegues a las comisuras. Sólo un poquito, que no resulte exagerado.