Muchas veces se hacen dietas y dietas que, finalmente, se abandonan porque no se consigue el objetivo de adelgazar. Sin embargo, hay ocasiones en las que el problema no está en las pautas de alimentación que se siguen, sino en una serie de malos hábitos en alimentación que impiden bajar de peso y que, incluso, son los responsables de que se cojan kilos de más.
Los errores
Uno de los mayores errores que se puede cometer cuando se quiere bajar de peso o bien mantener la línea es no desayunar. Es totalmente contraproducente porque, precisamente, el desayuno permite que las enzimas que son responsables de quemar calorías se pongan a trabajar. Si no se activan, el organismo sigue almacenando la grasa.
Otro de los problemas es comer muy rápido. Con cualquier comida que se haga, hay que tomarse su tiempo para masticar bien y que se pueda tener la sensación de saciedad. Solo así se evita comer de más.
Por supuesto, no es nada bueno pasar hambre porque el organismo se adapta con gran rapidez a los períodos de escasez de alimentación por lo que se produce una ralentización del metabolismo y es más difícil perder peso porque se tiende a acumular para reservas que el cuerpo puede necesitar posteriormente. Lo mejor es hacer cinco comidas al día.
Picar entre horas tampoco es la solución más adecuada, entiendo por este picoteo comer más de esas cinco veces diarias recomendadas, aunque sean pequeñas cantidades, porque es la manera más fácil de ir sumando calorías.
Los alimentos light igualmente forman parte de la lista de errores, puesto que siguen teniendo calorías por lo que se debe extremar la cautela con su consumo para no engordar. Y tampoco hay que beber alcohol porque es muy calórico. Sin embargo, no hay motivo para evitar el pan porque es saciante y nutritivo, aunque se debe tomar con moderación.
También hay que decir adiós a las dietas drásticas porque no son una solución a largo plazo. Pueden funcionar al principio, pero luego los kilos se vuelven a coger rápidamente y cada vez suele ser más difícil volver a quitárselos. Es mejor optar por pautas de alimentación, que la persona pueda seguir sin problemas en su día a día.
Y, finalmente, es conveniente no pesarse todos los días porque las oscilaciones de peso de un día para otro no son significativas y este gesto solo puede contribuir a que aumente el desánimo y a comer más y más.
Hola me siento muy triste porque me cuido mucho mi alimentacion es miy sana y no puedo bajar de peso y tomo mucha agaua que sera lo que edtoy haciendo mal