Frecuentes cambios de color, permanentes, alisados con la plancha y otros tratamientos para el cabello pueden llegar a dañártelo hasta el punto de quemarlo por completo. Cuando el pelo se quema, queda duro y áspero, pero a la vez débil y quebradizo. Como resultado de ello es casi imposible peinarlo o darle forma, y al mismo tiempo se cae y se rompe con mucha facilidad, haciendo que nuestro cabello pierda todo su atractivo. Sin embargo, existen una serie de remedios naturales a los que podemos acudir a la hora de recuperar la salud y belleza de nuestro pelo.
Aquí tienes alguno de ellos:
– Lávate el pelo con el champú de siempre. En el siguiente lavado mezcla un poco de champú con un tomate exprimido y lávate el cabello de nuevo con la mezcla. Déjala actuar durante quince minutos y finalmente acláralo. Poco a poco irás observando los resultados.
– Mezcla un aguacate y un yogur natural hasta lograr una pasta que puedas manejar con facilidad. Después aplícala sobre el cabello para después enjuagarlo con agua tibia.
– Aplica aceite de almendras sobre el cabello. Puedes aplicarlo solo o mezclándolo con una yema de huevo y una cucharadita de miel. Cuando hayas obtenido una mezcla homogénea aplícatelo sobre el cabello dejándolo actuar durante media hora y finalmente lávalo como siempre. Debes aplicarte esta mezcla como mínimo una vez por semana.
– Hierve un puñado de perejil en un litro de agua hasta que sólo quede un cuarto de agua. Deja enfriar la infusión, cuélala y guarda el líquido resultante en un rociador. Cuando te laves el cabello y después de haberlo secado bien, aplícate el concentrado de perejil. Hazlo dos veces por semana.