Seguramente utilizas cremas, haces dieta, bebes agua, practicas ejercicio y has probado métodos con los que consigues mejorar el aspecto o eliminar la celulitis, pero luego vuelve a aparecer. Aunque vayamos de cara al invierno y no haya que lucir el bikini, no hay que bajar la guardia ni cesar en la lucha para acabar con ella con el fin de que el problema no empeore y conseguir solucionarlo. ¿Qué hacer? Aquí hablamos de otros tratamientos, quizá menos conocidos pero con los que se puede obtener resultados, y de otros más populares pero que se reinventan con los últimos avances científicos. Eso sí, siempre hay que ponerse en manos de un buen profesional.
Los tratamientos
Dentro de los tratamientos para eliminar la celulitis que existen en los centros médicos y estéticos, está la carboxiterapia, que consiste en infiltrar en la piel anhídrido carbónico para acabar con el exceso de grasa localizada.
Esta técnica se encuentra también en el celumasaje, que suele aplicarse tras la carboxiterapia, en lo que se conoce como C+C, y que utiliza radiofrecuencia e infrarrojos en unos rodillos circulares con los que se masajea la zona.
Otra alternativa es la termosudoración, que se basa en una envoltura osmótica anticelulítica que tiene bandas de infrarrojos y que se combina con el gel para potenciar el efecto y acabar con la celulitis.
Las vendas frías es otra de las opciones para quemar las grasas localizadas. En concreto, se utilizan para envolver la zona utilizando vendas crioterápicas que generan ese efecto de frío en el cuerpo.
También se puede recurrir a la vela smooth, que es un aparato médico que emplea luz de infrarrojos, radiofrecuencia bipolar, succión y masaje de tracción de forma simultánea.
En auge está la intralipoterapia con Aqualyx, tratamiento del que muchos expertos coinciden en destacar que sustituirá a la liposucción. El sistema se basa en hacer un infiltrado con una técnica específica para reducir los cúmulos de celulitis.
La hidrolipoclasia también es una tendencia al alza. Es como una lipoescultura, pero que se realiza por ultrasonidos que rompen las células grasas en las que, como paso previo, se ha infiltrado suero fisiológico.
Finalmente, otras opciones son las vacunas orales anticelulíticas que tratan el problema desde el interior del organismo a través de composiciones que tienen que ser específicamente realizadas para cada paciente, y la biomesoterapia, que es una reinvención de la mesoterapia ante el avance de la medicina biológica y orthomolecular que emplea activos biológicos, antioxidantes celulares y oligoelementos, entre otros componentes, para atacar las celulitis más avanzadas.