En verano, debido al calor y la humedad, lo que menos nos apetece es realizarnos peinados altamente complicados para los que sea necesario utilizar mucho el secador o aplicar gominas, geles o espumas de fijación. Muy al contrario, nos apetece sobre todo llevar el cabello suelto o recogido de una forma sencilla. Además, el cloro de las piscinas, la sal del mar y el sol suponen agresiones que van a maltratar nuestro cabello, por lo que es conveniente mantenerlo de la forma más natural posible, sin aplicar productos que lo resequen en exceso o lo dañen.
La cola de caballo sigue siendo la estrella del verano, y este año podemos darle un toque años sesenta, dándole volumen encima de la cabeza y dejando mechas sueltas a los lados. Para darle ese volumen, una vez hecha la cola de caballo, con la mano sobre la coronilla estiraremos ligeramente el pelo hacia delante, aunque evitando que el volumen sea exagerado, ya que nos alargaría demasiado el rostro.
Si quieres llevarlo suelto, nada mejor que ondulártelo ligeramente, sin marcar demasiado las ondas, con lo cual le darás un aire desenfadado y veraniego.
Puedes ondulártelo haciéndote unas trenzas cuando esté húmedo y, una vez se haya secado, soltarlas y peinarlo. Si tienes el cabello ondulado, simplemente pasa los dedos por él cuando esté húmedo, cuidando de no tirar demasiado, para desenredarlo y déjalo secarse al aire.
Si quieres un peinado un poco más sofisticado pero igual de cómodo puedes realizarte un moño sencillo, ideal si tienes una melena de longitud mediana y larga. Para empezar péinate todo el pelo hacia atrás y recógelo en una coleta. Si quieres, puedes aplicar un poco de gomina en la parte delantera del cabello. Después, utilizando las horquillas que más te gusten, enlaza formando un moño el pelo que forma la coleta.
Me encantan todos los looks ojalá hagan algo para el cabello no tan rizado. sigan así felicidades