Las mujeres con el pelo ondulado o encrespado buscan siempre un alisado perfecto. Para ello suelen recurrir a la plancha del pelo y a darse en el cabello con el difusor después de haberse lavado la cabeza. Pero aparte de las mascarillas y los acondicionadores que se puedan utilizar para lograr un liso espectacular es muy importante el champú que se utilice.
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Cómo elegir el champú que mejor te va
A la hora de elegir un champú adecuado, lo primero que tienes que pensar es cómo es tu pelo. Qué características o problemas tiene. No es lo mismo ir a comprar un champú para pelo seco y castigado, que uno para pelo con tendencia a engrasarse, o uno para cueros cabelludos con caspa, por ejemplo. Aunque esto es obvio, lo difícil de la elección viene ahora, una vez hecha ya la primera distinción.
Es decir, que aunque sepamos que necesitamos un champú para pelo graso, hay tantas opciones en el mercado que no resulta fácil decidirse. A continuación te ofrecemos algunos consejos más o menos generales, que te sirvan para elegir con cierto.
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Champús naturales para el cabello graso
Cuando tenemos el cabello graso cuesta mucho mantenerlo limpio y brillante, ya que al poco tiempo de lavarlo, parece estar sucio de nuevo. El problema es que, si lo lavamos demasiado a menudo o con productos que no son adecuados, aumentaremos la cantidad de grasa y agravaremos así el problema. Para evitarlo, podemos recurrir a los champús formulados con ingredientes naturales que, además de no irritar el cuero cabelludo, nos van a ayudar a equilibrar y disminuir la grasa del cabello. Aquí te presentamos algunos de ellos para que los pruebes:
– Champú de bergamota: Para prepararlo necesitas tres cucharadas de glicerina, una taza y media de copos de jabón de Marsella o vegetal, tres cuartos de taza de alcohol, tres tazas de agua caliente y una cucharada de aceite de bergamota. Disuelve el aceite en el alcohol y cuando se haya licuado, añade la glicerina.
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Champús naturales para el cabello rizado
Pocas cosas conceden tanto atractivo a una mujer como tener un bonito pelo rizado u ondulado, brillante y lleno de salud. Sin embargo, este cabello tiende a ser seco y a quebrarse con facilidad. Por ello, al lavarlo debemos utilizar productos lo más naturales posibles, para cuidarlo y evitar que se vuelva aún más frágil, sobre todo si el rizo no es natural, sino que lo logramos mediante permanentes, pinzas de calor, etc.
Si te gusta disfrutar de la belleza natural, aquí te presentamos una serie de recetas de champús naturales que puedes hacer tú misma en casa:
– Champú de aloe vera: Para prepararlo necesitas medio litro de champú de ph neutro, un tallo grande de aloe vera fresco, un cuarto de taza de infusión, concentrada, de salvia y un cuarto de taza de vinagre de manzana. Comienza preparando la infusión de salvia, dejándola reposar lo más posible para que esté bien concentrada.
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Acondicionador natural para cabellos secos
¿Quieres que tu pelo huela muy bien? Te vamos a enseñar a preparar un acondicionador natural para cabellos secos que seguro te encantará. Para prepararlo necesitarás 200 ml de acondicionador base, 25 ml de aceite de almendras, 10 ml de aceite de coco y 20 gotitas de esencia de gardenia.
Cuando tengas esos productos, coloca el acondicionador base en un recipiente. Puedes utilizar el acondicionador de uso diario. Entonces agregarle el aceite de almendras y remueve lentamente, este tipo de aceites son especiales especial para nutrir cabellos secos, incluso para los teñidos. A continuación agrega el aceite de coco y mezcla bien, este ingrediente aportará mucho brillo al cabello.
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Elegir el champú correcto para nuestro cabello
Cada mujer tiene un tipo de cabello distinto según sus características. Puede ser fino, grueso, graso, mixto o seco, débil o fuerte, abundante o escaso, etc. Por ello debemos tener en cuenta estas características cuando decidamos cuál es el champú adecuado para nuestro tipo de cabello.
Ya que nos lavamos el cabello como media dos veces por semana, es bueno alternar dos tipos de champú, con lo que conseguiremos que el cabello no se acostumbre al tratamiento y deje de hacer efecto. Debemos usar uno que sea neutro con un pH de 5.5 para regular el pH y estimular las células del cuero cabelludo. El lavado siguiente lo haremos con el champú adecuado para nuestro tipo de cabello, sin olvidarnos del cuero cabelludo.
Si tenemos problemas de caída del cabello o problemas hormonales, lo más recomendable para nosotras es utilizar un champú de tratamiento que nos ayude a fortalecer la raíz del pelo al tiempo que protegemos el resto del cabello, alternándolo también con el champú de pH neutro.
Si tenemos el cabello permanentado o seco, deberemos elegir un champú específico para él, que aportará vitaminas e hidratación para fortalecerlo e hidratarlo. También es bueno aplicar una mascarilla que hidrate el cuero cabelludo y el cabello. Este tipo de pelo no se debe lavar más de tres veces por semana, para no hacerlo más seco.
Si tu cabello es graso, es conveniente alternar el champú específico para cabello graso con el champú neutro. En ambos casos podemos aplicarlos con movimientos circulares con las yemas de los dedos por todo el cuerpo cabelludo, pero sin restregar ni utilizar las uñas para que la caspa no nos aparezca por la fricción. Debemos lavarnos el pelo mínimo tres o cuatro veces por semana para mantenerlo en perfecto estado.
Wella Lifetex Pure: champú exfoliante
Si últimamente notas que tu cabello no queda totalmente limpio o te dura muy poco quizás lo que necesites es una limpieza más profunda.
No se trata de lavarlo todos los días o usar champús agresivos. Para estos casos lo más recomendable es una “exfoliación” del cuero cabelludo. No te asustes, se trata de un lote de productos Wella que desintoxican tu pelo.
El champú Wella Lifetex Pure Purifying Shampoo posee una fórmula suave y delicada con base de agua de uso semanal que prepara el cabello para los efectos nutritivos e hidratantes de Wella Lifetex Pure Aqua Essence.
Las suaves microperlas proporcionan una limpieza en profundidad y liberan el cabello de residuos, dejándolo preparado para su cuidado e hidratación. Estos residuos proceden en su mayoría de los productos de estilismo (espumas, lacas, geles de peinado…).
El acondicionador sin aclarado con textura de gel, Wella Lifetex Pure Aqua Essence, tiene la propiedad de transformarse en gotas hidratantes al frotarlo entre las palmas de las manos. Estas gotas aplicadas sobre el cabello lo hidratan en profundidad, devolviéndolo al cabello su pureza natural.
En tus manos, el gel se transforma en líquido puro para proporcionarte hidratación gracias a su uso diario. Al contrario que otros acondicionadores no hace que tu pelo pese, lo deja más fácil de peinar y tiene una caída natural.
Deja que la naturaleza y las poderosas y purificadoras cualidades del agua transformen tu cabello hasta un estado puro y vigoroso.
Yo lo uso cada dos semanas, alternando con otro champú claro está, y el pelo me queda limpísimo. Eso sí, tienes que aclararte muy bien el champú porque de lo contrario las microperlas exfoliantes se te quedarán en el pelo y parecerá que tienes el pelo sucio o con caspa.
Después de aclararte el champú notarás el pelo muy áspero pero no te preocupes, tras aplicar el acondicionador el pelo vuelve a la normalidad.
No es recomendable usarlo ni antes ni después de aplicarte el tinte, ya que este reseca bastante. Deja pasar una semana para utilizar estos productos.
Dove Intense Care (Champú y acondicionador)
Los productos Dove son conocidos en España desde hace bastantes años y gozan de una buena reputación. Unos pocos años atrás Dove se empezó a enfocar más en productos dirigidos a la mujer incluyendo jabones, productos de belleza y cuidado capilar. Se arriesgaron basando sus productos en las necesidades de “la mujer real”: madres, abuelas, hijas…
Su éxito radica en dos cuestiones fundamentales: los productos Dove son de los mejores que podemos encontrar en cualquier supermercado. La segunda es que las mujeres que durante muchos años habían sido olvidadas por la industria cosmética salen a la luz. Ellas usan productos Dove porque las representa…
Bueno, vayamos al grano: el champú y acondicionador reparador de Dove. Estos productos están diseñados para satisfacer las necesidades de cabellos especialmente dañados. El problema normalmente parte de los tintes, mechas, abuso del secador, permanentes etc. Esta línea de tratamiento lleva un sérum especial que trabaja el pelo desde dentro hacia fuera, repara cada pelo de cada mechón. Además le proporciona hidratación, algo fundamental para lucir un pelo más brillante.
Los resultados hablan por sí mismos. Sólo tenéis que probarlo y ya me contaréis. Yo lo he usado y la verdad es que el pelo parece estar más sano y con una apariencia más uniforme. Además cada vez que lo usas el pelo va mejorando progresivamente, así que cuanto más lo uses mejor estará tu pelo.
Trucos para hacer crecer el pelo
Te vamos a contar algunos trucos para hacer que el pelo crezca más rápido, manteniendo un pelo sano y nutrido desde la raíz hasta las puntas. Puedes encontrar muchos productos efectivos para fortalecer el pelo y hacerlo crecer el pelo con más fuerza. Pero si no te quieres gastar dinero, puedes intentar con estas recetas caseras:
• Aceite de Oliva: Aplicar aceite de oliva durante media hora sobre el cabello seco y luego lávalo con agua. Si tienes un cabello graso, no apliques esta receta.
• Sábila y miel: Productos naturales para hacer crecer el cabello rápidamente. Para su aplicación, debes obtener la pulpa de sábila, mezclarlo con miel y aplicarlo al cuero cabelludo. Dejar actuar por durante veinte minutos y luego aclarar con agua.
• Cebolla: Si quieres tener un pelo sano, puedes picar media cebolla y mezclarla con el champú. Además de acelerar el crecimiento del cabello, le da un brillo espectacular.
• Desayuno especial: Cuando te levantes, tómate lo siguiente: una cucharada de lecitina de soja, otra de germen de trigo, un poco de miel, levadura de cerveza y mezcla todos los ingredientes en un bol con yogur natural. Si lo tomas cada día, verás como el cabello crece más rápido que de lo normal.
• Agua de patatas: Cuando cocines patatas, guarda el agua utilizada para hervirlas y utilízala para enjuagarse el pelo tras una ducha.
• Pastillas anticonceptivas: Coge unas cuantas pastillas anticonceptivas de cualquier marca, machácalas hasta que se conviertan en un polvo y agrega en el champú acondicionador que sueles usar.
• Aceite de romero: En una taza, mezcla aceite de oliva y dos cucharadas de romero seco. Calienta en el microondas durante unos minutos, dejar reposar unos días, utiliza la preparación para hacerte masajes en el cuero cabelludo.
• Agua fría: Enjuagar o lavar el cabello con agua fría, es mejor que el agua caliente.
Cuidados para el cabello graso
El cabello graso suele ser más brillante debido al exceso de las glándulas sebáceas creando una especie de aceite en el cuero cabelludo, ensuciando el pelo con más facilidad. Este tipo de cabellos debe ser tratado con productos que eliminen la presencia del sebo y así controlar la secreción de grasa, que puede causar la caída del cabello. En ese sentido, la alimentación es muy importante, pues el cabello grasoso puede ser el resultado de una dieta alta en grasas, dado que las comidas fritas, carnes rojas y productos lácteos fomentan la producción de sebo.
La acumulación de grasa requiere unos lavados más intensos y frecuentes que otros tipos de cabello. En la actualidad, existen champús que controlan la grasa sin perjudicar el cuero cabelludo. Sin embargo, no se recomienda masajearlo con fuerza porque puede irritar los poros y producir que segreguen más grasa. La principal ventaja de este tipo de cabello es el bonito brillo que desprende cuando está recién lavado, pero lo malo es que dura poco tiempo limpio. También se caracteriza por la falta de volumen.
Champú: Lo fundamental es elegir un champú bajo en grasa, suave y sin alcohol.
Peinado: El cepillado puede incitar al aumento grasa. Por lo que es recomendable no hacerlo con fuerza, ni muchas veces.
Aclarado: Lo ideal es terminar la ducha con agua fría, puesto que el contrate de temperatura reduce la estimulación de las glándulas sebáceas cerrando los poros.
Remedios naturales: Podemos aplicar mascarillas naturales de alimentos como vinagre, yogur, miel, cerveza, limón, aloe vera o huevo, que aplicadas sobre el cabello después del lavado, pueden reducir considerablemente la acumulación de grasa, aunque no son una solución definitiva.