El cansancio, el estrés, el ritmo diario… son factores que hacen que la cara se tense –muchas veces de forma inconsciente-, lo que hace que se vea más rígida, menos expresiva y, en consecuencia, se parezca que se tienen más años de los que realmente son porque esas expresiones van dejando marca. ¿Qué puede hacerse? En estos casos, aparte de los tratamientos y cuidados faciales pertinentes, es muy útil relajar la cara. ¿Cómo se hace? Toma buena nota de estos consejos para que notes la diferencia.
SEGUIR LEYENDO «¿Quieres parecer más joven? Trucos y consejos para relajar la cara»
Trucos para relajarse y evitar los daños del estrés en la piel
El estrés no solo tiene repercusiones en la salud de las personas, sino que sus efectos negativos también se notan en la piel, sobre todo, en la del rostro. Apariencia de cansancio, tensiones, piel más deshidratada o bien incluso aumento de la presencia de granitos… son solo algunos síntomas de que la dermis puede estar estresada. Una situación a la que conviene ponerle solución. Con unos sencillos trucos para relajarse puede ser suficiente. Además, puedes hacerlo en casa sin necesidad de tener que acudir a clases específicas.
SEGUIR LEYENDO «Trucos para relajarse y evitar los daños del estrés en la piel»
Ejercicios para relajar el cuello
El cuello es una de las partes más importantes del cuerpo y a las que hay que prestar igualmente mucha atención porque es una de las áreas más propensas a acumular tensión y a mostrar el paso del tiempo en forma de arrugas. Con unos sencillos ejercicios, se puede conseguir mantener la zona relajada y retrasar la aparición de los signos de la edad.
SEGUIR LEYENDO «Ejercicios para relajar el cuello»
La importancia de la relajación para estar guapos
El estrés y otras preocupaciones relacionadas con las tensiones mentales siempre han causado estragos en nuestra vida y por lo tanto en nuestra belleza. Uno no puede decir no a las presiones, a los nervios de un trabajo demasiado constante, a la carga de una familia, etc. Pero, todo tiene solución. Debes intentar apartar el estrés, la ansiedad y las dolencias físicas para conseguir una vida saludable.
La relajación es uno de los métodos más sencillos para mantenerte bella y fresca y de esta manera controlar el estrés. No hay necesidad de tomar clases de relajación. Esta es una condición que puedes incluir fácilmente en tu vida de manera regular, ya que lo puedes hacer a cualquier hora. Los problemas relacionados con la mente, el corazón, la piel, el sistema digestivo, el reproductivo, el endocrino, el sistema inmunológico, el neurológico, etc. se alivian en gran medida con el uso de técnicas de relajación.
Con el fin de practicar la relajación organízate para tener al día media hora completamente libre. Es mejor practicar la relajación cuando la mayor parte de la jornada de trabajo se ha realizado. Selecciona un lugar donde no tengas distracciones. Es mejor que consigas un sitio con un ambiente fresco y en el que puedas cambiarte la ropa de trabajo por una mucho más cómoda.
El cuarto debe estar limpio, ventilado y ser cómodo. Siéntate en un sillón reclinable, en un sofá o incluso acuéstate en la cama. Puedes escuchar música tranquila y dejar simplemente una luz tenue en alguna parte de la sala. La relajación tiene un efecto positivo inmediato en el bienestar general de cualquier individuo y en la belleza que este irradia.
Aliviar las piernas cansadas
La mayoría de las mujeres, al terminar el día, sienten las piernas hinchadas y cansadas, sensación producida por la retención de líquidos que se ha producido durante el día que se acumula en pies y tobillos. Sin embargo, existen ciertos trucos para aliviar y prevenir dicha sensación.
Al terminar nuestra ducha diaria, alternar chorros de agua fría y caliente en las pantorrilas y tobillos, y terminar con un chorro de agua fría. El chorro de agua se dirigirá siempre del tobillo a la pantorrilla, con el fin de estimular la microcirculación. Después, aplicaremos crema hidratante, siempre siguiendo el movimiento ascendente desde el tobillo.
Cuando lleguemos a casa, podemos sentarnos o tumbarnos un rato con las piernas a mayor altura que las caderas, para ayudar al retorno de la circulación venosa. Para mayor comodidad y eficacia de este remedio, podemos probar a echarnos en una colchoneta de yoga o pilates y apoyar las piernas verticalmente contra la pared. Podemos mantener esta postura unos diez minutos y al ponernos de pie notaremos como ha desaparecido la pesadez.
En el trabajo, sobre todo si pasamos muchas horas sentadas delante del ordenador, cada hora podemos hacer unas flexiones de tobillo, moviendo el pie arriba y abajo y girando el tobillo en ambas direcciones, así como andar unos pocos pasos yendo a buscar ese documento que tenemos en la impresora o bajando y subiendo las escaleras a pie hasta la cafetería en lugar de tomar el ascensor.
Es muy importante también hacer deportes como caminar, correr y montar en bicicleta, para lo que podemos usar una estática si no tenemos oportunidad de salir a pedalear en un parque o un carril-bici. Y el consejo más importante: beber mucha agua.