Hasta ahora la única técnica a la que podíamos acudir cuando queríamos corregir la forma o el tamaño de la nariz era la rinoplastia, pasando por el quirófano. Sin embargo, ahora tenemos la oportunidad de cambiar la forma de nuestra nariz sin necesidad de cirugía ni de pasar por postoperatorios molestos, lo que logramos mediante una técnica denominada Rinomodelación Angular.
Esto se logra mediante una intervención que consiste en implantar materiales de relleno en diferentes puntos de la nariz, lo que permite, sin necesidad de cirugía, modificar el perfil del paciente. Sólo es necesaria anestesia local y, tras tres minutos, conseguiremos un cambio visible en nuestra fisonomía.
El proceso comienza aplicando una pomada anestésica en la zona a tratar y, cuando ha hecho efecto, se infiltran los materiales que sirven para ir dando una forma nueva a la nariz. Para que sea efectivo, las infiltraciones se realizan en los lugares que más definen el contorno de nuestra nariz, como la punta o la parte superior de la misma. Mediante las infiltraciones se rellenan pequeños huecos, se cambia el ángulo de la punta de la nariz o se suavizan ángulos.
Puede que sea necesario recibir varias sesiones de tratamiento antes de conseguir el resultado esperado, con la ventaja de que podemos seguir nuestra rutina habitual inmediatamente después de cada sesión. Lo único que no se puede lograr con esta técnica es cambiar el tamaño de la nariz, en ese caso aún debemos acudir a la rinoplastia, pero si quieres tener una nariz más armoniosa sin necesidad de pasar por el quirófano.
Aunque la técnica es muy sencilla, no olvides que, como en todo tratamiento estético debes ponerte en manos de profesionales cualificados para recibir el tratamiento con todas las garantías.
donde estan ubikados o los telefonos de ustedes
gracias