Tónicos faciales caseros para la piel grasa


En el cuidado de la piel grasa es necesario, en el momento de tonificarla, aplicar un producto astringente con un alto grado de acidez para cerrar los poros y evitar que la piel produzca un exceso de grasa. Aquí te damos algunas ideas para tonificar tu piel con productos naturales:

Tónico astringente de piña: Necesitas una rebanada de piña, media manzana roja, cinco uvas verdes, cuatro cucharadas de té de manzanilla y cuatro cucharadas de agua de rosas. Para hacer el tónico coloca todas las frutas en la batidora y agrega el agua de rosas. Bátelo durante tres minutos. Pasado este tiempo, sigue batiendo y agrega, poco a poco, el té de manzanilla poco a poco, el té de manzanilla. Después, con un algodón, aplica la preparación sobre el rostro con masajes suaves circulares. Déjala actuar durante cinco minutos y finalmente aclárate la piel con agua fresca.

Vinagre de rosas: Necesitarás 100 gramos de pétalos secos de rosas rojas, una taza y media de vinagre de vino blanco y una taza de agua de rosas. Para prepararla, mezcla los pétalos de rosas con el vinagre y déjalos macerarse durante quince días tras los cuales debes añadir el agua de rosas. Después cuela la preparación. Aplícalo sobre tu cutis y para terminar aclárate el rostro con agua. Una receta efectiva y bella.

Tónico astringente de limón: Necesitas dos cucharadas de zumo de limón, media cucharada de glicerina, una cucharada de alcohol y unas gotas de loción de hamamelis. Para prepararla mezcla el zumo de limón con el alcohol y la glicerina. Revuelve bien hasta que se emulsionen perfectamente y finalmente agrega la loción de hamamelis. Empapa un algodón con la preparación y limpia tu rostro con ella. Déjala actuar durante cinco minutos y termina aclarándote con agua fresca.

Luminoterapia, rejuvenece bañándote de luz


La luminoterapia o terapia lumínica es un tratamiento que consiste en la exposición a la luz de una lámpara que emite una luminosidad parecida a la solar, pero que filtra los rayos ultravioletas. Esta terapia se usa para terminar con las manchas, las arrugas y el acné de zonas como el rostro, los ojos, el pecho, el escote y las manos. Ya en la antigüedad se conocían los beneficios del sol sobre la piel y, entre otros tratamientos de belleza, se utilizaban los baños de sol.

Para realizarlo, se coloca un tablero facial sobre el rostro del paciente y se selecciona la energía lumínica que se necesita según el probelma específico que se quiera tratar. Por normal general las sesiones duran cuarenta y cinco minutos. Se generan diferentes tonos de luz, obteniendo con cada uno unos efectos diferentes:

– La luz azul hace que disminuya el acné y la piel produzca menos grasa.

– La luz roja penetra en las capas más profundas de la piel y estimula la producción de colágeno. También combate diferencias de pigmentación y reduce los efectos del paso del tiempo en tu piel.

– La luz amarilla elimina las manchas.

– La luz verde es ideal para tratar pieles sensibles.

Para obtener resultados óptimos hay que hacer como mínimo ocho sesiones, aunque esto depende de la edad y del problema que queramos tratar.

No se siente dolor alguno al someterse a esta técnica. Tampoco produce irritación en la piel, y no tiene contraindicaciones, con lo cual cualquier persona, independientemente de su edad puede someterse a esta terapia. Tampoco tiene ningún efecto adverso sobre la piel.

Como en todo tratamiento estético que decidamos llevar a cabo, es necesario acudir a buenos profesionales que nos ofrezcan garantías y confianza.

Cuidar el cutis después de los cuarenta


A partir de los cuarenta, nuestra piel necesita cuidados más específicos para mantenerse tersa y evitar la deshidratación y la aparición de arrugas. Quizá la regla de oro a partir de este momento es utilizar siempre protector solar, tanto en invierno como en verano. Pero también es necesario crear una nueva rutina para cuidar tu piel:

Limpieza: Debes limpiarte el cutis dos veces al día, todos los días. Si te olvidas de desmaquillarte pro la noche, tus poros se tapan y la piel no puede rejuvenecerse por sí misma, con lo cual nuestra piel tendrá un aspecto opaco y poco saludable.

Usa para la limpieza agua templada y un producto limpiador suave, sin alcohol y libre de astringentes. Sécate suavemente con una toalla de fibras naturales y recuerda que no debes frotarte la cara con fuerza ni usar agua caliente, ya que eso puede irritar tu piel.

El sistema de los tres pasos: Muchas marcas de cosméticos utilizan un sistema de tres etapas ó pasos que consisten en limpieza, tonificación e hidratación, y es muy aconsejable para lograr una piel perfeta. Después de realizar la limpieza como hemos indicado más arriba, utiliza un tónico para eliminar el exceso de grasa del cutis y destapar los poros. Una vez que los poros están completamente limpios, aplícate crema hidratante en la cara y el cuello.

No te obsesiones: Aunque la limpieza regular es la clave para cuidar tu piel a partir de los cuarenta, es importante no exagerar, porque si te lavas la cara o te duchas más de dos veces al día, puedes eliminar los protectores e hidratantes naturales que produce tu piel, que puede desembocar en un exceso de sebo o en problemas de piel reseca.

Combatir las patas de gallo de forma natural


Todas sabemos bien lo que son las patas de gallo, esas arruguitas que nos salen en las comisuras de los ojos y que forman parte de las denominadas arrugas de expresión, ya que no sólo tienen que ver con la edad. Sin embargo, al contemplarlas en el espejo nos da la sensación de que envejecen nuestra mirada y nuestro aspecto. Por ello aquí te damos unas ideas para combatirlas de forma natural:

Mascarilla de papaya: Para prepararla, necesitas una taza de pulpa de papaya que no esté madura y una cucharadita de jugo de piña. Haz un puré con la papaya y añade la piña para aumentar sus. Después aplícala sobre las patas de gallo y déjala actuar durante diez a quince minutos. Pasado ese tiempo, enjuágate con agua templada. Puedes repetir este tratamiento dos veces por semana. Eso sí, ten mucho cuidado de que no la mascarilla no te entre en los ojos. Si te ocurre, acláralos con abundante agua.

Tratamiento anti patas de gallo: En una licuadora prepara el zumo de una o dos zanahorias. Después, añádele una cucharada de aceite de girasol. Bate bien los ingredientes hasta que tengas una mezcla homogénea. Cuando la tengas, aplícala alrededor de los ojos y déjala actuar durante diez minutos. Finalmente enjuágate con agua fresca.

Crema nocturna para patas de gallo: Vas a necesitar dos cápsulas de vitamina E y dos uvas verdes a las que tienes que quitar la semilla. Para prepararla, parte las dos cápsulas de vitamina E y mézclala con las dos uvas verdes. Aplícate la preparación todas las noches en los ojos y délaja actuar hasta la mañana siguiente. Cuando te levantes, enjuágate con agua fría.

Peróxido de benzoilo contra el acné


Seguro que si tienes acné, ha oído hablar del peróxido de benzoilo. La mayoría de los tratamientos más habituales que se utilizan en la lucha contra este problema, suelen contener peróxido de benzoilo. Forma parte de muchos limpiadores, cremas, pomadas, geles y lociones.

Las bacterias que causan el acné son anaeróbicas, lo que significa que no pueden sobrevivir en un ambiente rico en oxígeno. El peróxido de benzoilo hace que el entorno en el que se intentan desarrollar estas bacterias sea intratable de forma que destruye el sebo que obstruyen los poros y rellena dichos poros con oxígeno. Cuanto más oxígeno penetra en la piel mayor es el número de bacterias que desaparece por lo que la piel sufrirá menos brotes del tan temido acné.

También el peróxido tiene otra propiedad que le hace más eficaz en la lucha contra los granos y es su capacidad para limpiar las células muertas de la piel, que normalmente se acumulan en la piel. Antes de utilizar el benzoilo consulta con un dermatólogo que te aconseje y te ayude. Si no vas al médico, o mejor es que utilices un producto muy suave que no supere el 2,5%.

Los productos que contienen una mayor cantidad pueden irritar la piel y provocar erupciones por lo que es mejor empezar con productos con cantidades bajas de peróxido hasta que la piel se vaya aclimatando. Para obtener mejores resultados se debe usar con la piel limpia y seca, y mantenerlo alejado de la zona del cuello y de la ropa. Tiene un suave efecto blanqueador que podría dañar la piel más sensible y los colores de la ropa. Acude primero al médico.

Tónicos faciales caseros para la piel normal


Después de exfoliar la piel y abrir los poros, debemos de cerrarlos para evitar que entre suciedad en ellos y se formen granos y espinillas. Esto lo conseguimos gracias a los tónicos, que, además, refrescan la piel, le dan firmeza y eliminan los residuos que quedan de las cremas limpiadoras que hemos utilizando anteriormente. Puedes utilizar tónicos comprados en tiendas pero, si quieres, también puedes probar estos tónicos faciales caseros:

Tónico de manzanilla: Necesitarás una taza de agua y una cucharada de flores de manzanilla. Pon el agua a hervir. Cuando rompa el hervor, retírala del fuego y añade la manzanilla. Tapa el recipiente y déjalo reposar durante unos diez minutos. Cuando haya pasado este tiempo, cuela la preparación y utiliza la infusión como tónico después de limpiar la piel

Tónico de miel: Necesitarás miel y loción de hamamelis. Mezcla en la misma propiorción la miel con la loción hasta obtener una crema. Aplícala en la cara. Notarás como tonifica y refresca tu rostro al mismo tiempo. Después aclárate el rostro. Este tónico tiene la ventaja de que puedes preparar mayor cantidad y conservarlo en un frasco de vidrio cerrado en la nevera.

Tónico de perejil: Vas a necesitar tres o cuatro ramas de perejil fresco y un vaso de agua. Hierve el agua y cuando rompa el hervor, quítala del fuego. Después añade el perejil y deja reposar la mezcla hasta que se enfríe. Finalmente, moja un paño suave en la preparación y aplícalo en la cara durante cinco minutos. Aclárate pasado este tiempo.

Tónico de cítricos: Necesitarás una cucharada de zumo de limón, una de zumo de naranja, una de pomelo y una taza de yogur. Mezcla el yogur con las tres cucharadas de zumo hasta conseguir una mezcla homogénea. Después aplícala sobre el cutis. Déjala actuar dos o tres minutos y finalmente aclárate la cara con agua tibia y fría al final.

Cómo tratar el cutis seco


Si la piel de nuestro rostro es seca, deberemos mimarla con atención, ya que la sequedad de la piel contribuye a la aparición anticipada de arrugas y a que se noten más los signos de fatiga o envejecimiento de la piel y sufra un envejecimiento prematuro, acentuado por la debilidad de este tipo de cutis ante factores externos como el sol o el viento.

Sin embargo, no todo es negativo, ya que, con ciertos cuidados, lograrás que tu piel mantenga un aspecto joven y saludable:

– Es aconsejable una dieta variada, rica en nutrientes y vitaminas, con lo que, en tu caso, las frutas y las verduras son auténticos aliados para tu piel.

Bebe mucha agua, ya que una de las causas de la sequedad del cutis es la falta de agua en las capas internas de la piel, provocando la deshidratación de la misma.

Protege tu piel frente a los factores externos, como el sol o el frío, porque es muy sensible ante ellos. No te olvides de aplicar una crema hidratante cada mañana antes de salir de casa que tenga factor de protección solar.

– Utiliza jabones alcalinos, leches limpiadoras y cremas basadas en emulsiones de aceite en agua.

– Los jabones o geles que mejor te irán son los hechos a base de aceite de coco o de avena, así como los que tienen PH neutro.

Cada noche haz una limpieza del rostro con una leche limpiadora específica para pieles secas y aplica después una crema nutritiva e hidratante. Al hacerlo por la noche, la piel abosrberá poco a poco los nutrientes de la crema.

– No te olvides de la exfoliación, que te ayudará a eliminar las células muertas y la suciedad de los poros, dando a tu piel un aspecto saludable.

Cuidados para el cutis graso


El cutis graso es aquel cuyas glándulas sebáceas producen demasiada grasa, lo cual a la larga obstruye los poros y provoca la aparición de los granos y los puntos negros. Además, esa misma grasa hace que brillen zonas de la piel en las mejillas o la nariz. Sin embargo, siguiendo unos pequeños consejos conseguirás una piel brillante y libre de granos y puntos negros:

Desmaquíllate todas las noches, incluso aunque no te hayas maquillado. Utiliza un tónico sin alcochol para eliminar la suciedad de tu rostro. Esto es esencial porque impedirá que se obstruyan los poros.

– Debes ser muy metódica con el cuidado de la piel de tu rostro y lavarte por la mañana y por la noche con un jabón con PH neutro o específico para cutis grasos.

– Utiliza cosméticos libres de aceites.

– Si tienes puntos negros o espinillas, no te los toques ni intentes eliminarlos. Con una limpieza correcta terminarán por desaparecer.

– Practica algún deporte, ya que al sudar elminas impurezas que, de otra forma, serán secretadas por las glándulas sebáceas.

Restringe todo lo que puedas el consumo de carne y productos grasos en tu dieta y aumenta el de frutas y verduras. Pero, aunque los restrinjas, no renuncies a ningún tipo de alimento.

– En la medida que puedas, evita las situaciones de estress o ansiedad, que alteran el equilibrio del cuerpo y contribuyen al aumento de grasa.

– Haz una exfoliación de la piel cada dos semanas.

Una vez a la semana aplícate una mascarilla casera. Debes aplicártela después de haber limpiado tu cutis con jabón y haberte aplicado un tónico sin alcohol. Si puedes aplicártela durante el baño, cuando tus poros estén completamente abiertos, lograrás que el producto sea mucho más eficaz.

Cuidados para la piel mixta


El cutis mixto es el que presentamos la mayoría de las mujeres. No es ni seco ni graso, sino una mezcla de los dos, también con los problemas y complejidades que conllevan ambos tipos de cutis. Normalmente en este tipo de cutis se mezclan una zona grasa, denominada Zona T, formada por la frente, la nariz y la barbilla y el resto del rostro que es seco. Esta Zona T es la más problemática, porque es donde tienden a aparecer los granitos y puntos negros y nos complica a la hora de tratar este tipo de cutis.

Aunque lo lógico sería cuidar cada parte del rostro por separado, al final terminaría siendo muy engorroso, por eso es esencial utilizar productos específicos para las pieles mixtas que aporten hidratación sin hacer que aumente la grasa de nuestro cutis.

Es muy importante hidratar las pieles mixtas porque las zonas más grasas también pueden estar deshidratadas. Busca un producto de textura fluida y ligera y sobre todo que esté libre de aceites. Para aplicarlo, comienza extendiéndolo por las mejillas, masajeando hasta que se absorba casi totalmente. Después, extiende lo que te sobre por la frente, la nariz y la barbilla para que no haya exceso de grasa.

Para hacer una mascarilla casera específica para la piel mixta, pon una cucharada de yogur en un bol. Añade una cucharadita de miel que esté a temperatura ambiente o un poco caliente para potenciar sus propiedades. Después añade doce o catorce gotas de limón y mézclalo bien todo. Aplícalo en la cara pero teniendo mucho cuidado de que no entre en contacto con los ojos y mantén la mascarilla unos veinte minutos aproximadamente. Finalmente aclárate la cara con agua templada.

Colocar fácil unas pestañas postizas


Tener unas pestañas largas es el sueño de muchas mujeres. Por si no lo sabes, existen técnicas de maquillaje y postizos que te pueden ayudar a conseguir el aspecto que deseas. Si quieres que tus pestañas parezcan más largas, puedes utilizar pestañas postizas. Aquí tienes unos consejos que te pueden ayudar:

– Para empezar, debes asegurarte de que tu cara y la región de los ojos están absolutamente limpias. Además, debes comprobar la longitud de las pestañas postizas y su anchura, ya que podrían necesitar un pequeño “ajuste” para que se adapten a la perfección a la forma de tu ojo.

– Aplica una delgada capa de tu máscara de pestañas, por la parte superior. Deja que esta e seque antes de continuar.

– Si las pestañas postizas que has comprado tienen una cinta adhesiva todo será mucho más fácil. Si por el contrario, estás no traen el adhesivo, utiliza un palillo para extender una delgada capa de pegamento por la base de las pestañas.

– Coloca las pestañas falsas adecuadamente a lo largo de las tuyas. Comienza presionando por la zona del ángulo interno del ojo hasta la esquina exterior. Presiona suavemente durante unos segundos hasta que notes como quedan ajustadas correctamente.

– Espera, al menos, un par de minutos antes de darles una capa de rimmel.

– Cuando te las vayas a quitar, limpia bien la zona con tu desmaquillador habitual. Realiza esta acción con mucho cuidado, ya que si lo haces bien, podrás guardarlas para poder utilizarlas otro día.