Llega el calor y con él el momento de dejar en el armario los pantalones, las faldas largas y las medias, pasando a las minifaldas y los pantalones cortos. Es entonces cuando nos damos cuenta de que, durante el invierno, la celulitis se ha acumulado en nuestras piernas, la piel se ha vuelto más reseca y la retención de líquidos hace que aparezcan hinchadas. Proporcionar a partir de ahora una serie de cuidados a nuestras piernas nos permitirá mitigar los efectos del invierno y lograr que podamos lucir unas bonitas piernas.
El primer paso será combatir la celulitis, que puede haber hecho su aparición en las rodillas y será más visible en los muslos. Para ello, deberemos empezar a utilizar de forma regular productos anticelulíticos que nos ayuden a librarnos de ellas, además de realizar ejercicio de forma regular para movilizar las grasas y toxinas acumuladas. Beber abundante líquido también es importante para eliminar estas grasas y toxinas.
Es importante también realizar una exfoliación de la piel de las piernas, para eliminar las células muertas y lograr una piel luminosa y saludable. Con ella, además lograremos que la depilación, especialmente si utilizamos cuchilla, sea más efectiva y duradera, aunque no debemos depilarnos inmediatamente después de la exfoliación. Tras realizarla, debemos hidratar bien la piel, utilizando una crema hidratante adecuada para nuestro tipo de piel, hidratación que también nos ayudará a preparar las piernas para el sol.
La retención de líquidos es otro problema que deberemos tratar. Para ello, podemos incluir alimentos con propiedades diuréticas en nuestra dieta, además de realizar baños de contraste de agua fría y templada para estimular la circulación. Los masajes de drenaje linfático también están indicados para ello, siempre que los realice un buen profesional.