Crema limpiadora con polvo de sándalo para el cutis graso


Durante el verano, debido a los cambios hormonales o simplemente a momentos en los que llevamos una dieta poco equilibrada, dormimos poco y nos sentimos muy estresadas, o bien porque estamos utilizando productos que no son adecuados para nuestro tipo de cutis, la piel del rostro puede volverse más grasa de lo habitual, lo que nos ocasionará la aparición de puntos negros y espinillas.

En esas épocas es importante eliminar el exceso de grasa y lograr que nuestra piel recupere su equilibrio natural, para lo cual necesitaremos una crema que, al tiempo que limpie nuestra piel, no la irrite ni haga que se incremente la producción de grasa. Para lograr esto tenemos un gran aliado en una sustancia que suele utilizarse en los perfumes, pero que también la podemos aplicar para cuidar la piel del rostro, como es la madera de sándalo. Si deseas probar los beneficios que esta sustancia puede proporcionar a tu rostro, aquí te dejamos una receta natural para eliminar el exceso de grasa.

Necesitas hacer una pasta mezclando arcilla verde, polvo de madera de sándalo, dos gotas de aceite de clavo y dos gotas de zumo de limón, y una vez tengas la pasta, mézclala con agua de rosas hasta que adquiera la consistencia de una mascarilla. Aplícala durante quince o veinte minutos en el rostro y en el cuello y después aplícate rodajas de pepino o de patata en los ojos para reducir las ojeras. Cuando la mascarilla se haya secado, elimínala utilizando leche fresca, masajeando suavemente la piel mientras retiras la mascarilla.

Debes aplicártela tres veces por semana y no olvidarte de lavarte el rostro con agua tres o cuatro veces al día para eliminar el exceso de grasa.

Las mujeres mayores de 45 años pueden añadir a la mascarilla dos gotas de miel, para evitar que la piel del rostro se reseque.

Mascarillas purificantes para el cutis graso


Si tu cutis es graso, seguramente ya estás familiarizada con lo que eso significa: brillos en la piel, poros abiertos, puntos negros, granitos, y una casi permanente capa de grasa que cubre tu cutis. Todo ello se ve agravado porque, para controlar la producción de grasa, utilizamos productos que resecan mucho nuestra piel, de lo cual se defiende produciendo mayor cantidad de grasa aún, con lo que el problema va a peor.

Si tienes este tipo de piel, lo mejor es utilizar productos “oil free” o específicos para tu tipo de piel, ya que están formulados para regular la secreción de grasa. Pero sin duda el punto más problemático es la limpieza de este tipo de pieles, ya que es muy difícil encontrar productos que no afecten al equilibrio de nuestra piel. Por ello nada, mejor que utilizar mascarillas purificantes hechas con productos naturales que te ayudarán a eliminar la suciedad de los poros y a reducir los poros abiertos.

Mascarilla de yogur: Para prepararla mezcla medio yogur con un pepino triturado. Aplícatelo sobre la piel durante veinte minutos hasta que la mezcla se haya secado sobre la piel. Después aclárate la piel con agua tibia y finalmente aplícate una crema hidratante sin grasa.

Mascarilla de clara de huevo: Necesitas diez fresas maduras y una clara de huevo. Bate la clara a punto de nieve y después tritura las fresas. Mézclalo todo y aplícatelo sobre el rostro, dejándolo actuar durante veinte minutos. Para terminar aclárate el rostro con agua tibia.

Mascarilla de tomate: Necesitarás un tomate maduro y una cucharada de zumo de limón. Quita la piel al tomate y machácalo hasta obtener un puré. A continuación añádele el zumo de limón y aplícalo sobre la piel durante veinte minutos para terminar aclarándote con agua tibia.

Embellece tus pestañas


Los ojos son una de las partes más atractivas de nuestro rostro, a la que debemos dedicar una atención especial,, pero no sólo a ellos, sino a los elementos que los rodean, como pestañas y cejas. En lo que respecta a las pestañas podemos lograr que sean más bonitas con unos sencillos pasos.

Cepíllalas diarimente. Para ello utiliza un peine especial para pestañas y después extenderemos sobre ellas una capa muy fina de vaselina, aceite de ricino o una crema fortalecedora de pestañas que estimule su crecimiento. Lo haremos siempre de abajo a arriba y desde la raíz a las puntas.

El modo de aplicación siempre debe ser de abajo hacia arriba y desde la raíz hacia el extremo de las mismas. El mejor momento para hacer esto es por la noche, antes de irte a dormir, de forma que tus pestañas puedan aprovechar los nutrientes del producto. No debes hacerlo antes de aplicarte el rimmel, porque ello impediría que el producto se adhiriera correctamente.

Cuando te apliques el rimmel pinta las pestañas desde la raíz hasta la punta y mantén el cepillo paralelo al borde del párpado, excepto cuando te maquilles los bordes de los ojos.

Si estás utilizando una máscara de pestañas resistente al agua y quieres aplicar varias capas, debes hacerlo seguido, sin esperar a que las distintas capas se sequen. De lo contrario, te aparecerán grupos muy difíciles de eliminar.

Utiliza el rizador con suavidad, para no dañar o arrancar las pestañas sin querer. Nunca debes hacerlo con el rimmel aplicado, ya que les resta flexibilidad y se quebrarían.

Si se te ha secado la máscara de pestañas, no le añadas agua, porque el producto pierde sus propiedades y puede causar irritaciones en los ojos.

Delinear el contorno del rostro


Con el paso del tiempo los músculos de nuestro rostro van perdiendo firmeza y tonicidad, lo que hace que la piel se vaya “cayendo”, sobre todo la parte de las mejillas y la papada, con el resultado de tener un aspecto más envejecido y menos fresco de lo que nos gustaría.

Para evitarlo podemos realizar una serie de sencillos ejercicios faciales que nos ayudarán a tonificar los músculos, delineando de nuevo el contorno de nuestro rostro e incluso logrando atenuar las líneas de expresión.

Para realizarlos sólo necesitas unos minutos al día. Si quieres obtener buenos resultados, deberás realizaros tres veces al día, por la mañana, por la tarde y por la noche. Lo mejor es relajarte unos minutos antes de hacerlos para que sean aún más efectivos.

Puedes comenzar colocando tus dedos índices en cada extremo de tus ojos, como si los achinaras, para estirar las líneas de expresión. Mantén la postura durante cinco segundos y repítelo cinco veces. Puedes hacer lo mismo en la comisura de los labios, repitiéndolo también cinco veces.

Otro de los ejercicios que puedes practicar es “las vocales”. Para empezar, sitúate delante de un espejo de pie o sentada y sin sonido di la letra a, con fuerza, como si estuvieras gritando. Repítelo diez veces. A continuación haz lo mismo con la letra E, sintiendo como se tensan las mejillas y repítelo también 10 veces. Sigue con la letra I, O, U, notando como trabajan los músculos del rostro y repitiendo cada letra diez veces

Eliminar las manchas de la piel con Amelán


Para que nuestra piel adquiera ese color moreno que tanto nos gusta es necesario que el sol estimule la melanina, que es la sustancia que oscurece la piel con objeto de protegerla de los posibles daños producidos por los daños solares. Sin embargo, debido al paso del tiempo, a factores genéticos o a una excesiva exposición al sol la producción de melanina varía o se concentra en algunos lugares de nuestro cuerpo, lo que ocasiona la aparición de manchas oscuras, principalmente en el rostro y en las manos.

Esto se ve agravado por el proceso normal de envejecimiento y deshidratación de la piel, que hace que las manchas sean cada vez más acusadas.

Una de las técnicas más efectivas a la hora e eliminar estas manchas es la mascarilla de Amelán. Está formulada a base de ácido Kójico, sustancia que se extrae del licor de arroz, el shake, y tiene un gran poder blanqueante de la piel.

Esta mascarilla actúa sobre la manchas de la piel de forma descamativa, es decir, que va eliminando las distintas capas de la piel en donde está la mancha y es sin duda el procedimiento más sencillo y menos agresivo a la hora de eliminar las manchas tanto del rostro como de las manos. Es también esta falta de agresividad lo que hace que sean necesarias varias sesiones antes de ver los primeros resultados. Además de las manchas, dicho tratamiento puede ayudar a eliminar las cicatrices del acné.

Una vez aplicada la mascarilla, el profesional de estética te recomendará una crema específica para que te la apliques en casa de modo que los resultados sean duraderos. Es muy importante que cumplas esta parte del tratamiento, sobre todo en el caso de las manos.

Elegir un pintalabios discreto


Los pintalabios llevan utilizándose desde hace siglos. Cleopatra, teñía sus labios de color rosa utilizando el jugo de unas flores. El uso de este tipo de cosméticos ha ido evolucionando hasta llegar a nuestros días en los que en cualquier tienda especializada encontrarás cientos de modelos diferentes realizados con productos muy variados. Sea cual sea tu elección, siempre debes tener en cuenta que debe ser afortunada, ya que un pintalabios mal elegido puede estropear todo tu maquillaje.

Se deberían elegir pintalabios de acuerdo con el color de la tez de la persona que lo va a utilizar. Si además de elegir bien tu pintalabios, tienes unos bonitos labios bien cuidados y unos dientes blancos como las perlas, sólo tendrás que preocuparte de otras partes de tu maquillaje. Antes de comprarte cualquier pintalabios, aunque se lo hayas visto puesto a tu mejor amiga, lo mejor es que lo pruebes.

El pintalabios debe proporcionarte un aspecto natural y debes sentirte cómoda con el color elegido. En este caso, cuanto más discreto mejor. Durante el otoño y el invierno la piel va perdiendo el broceado del verano, así que recuerda que el color rosa tirando a blanco se convertirá en el protagonista de tu piel. Durante este periodo podrás buscar pintalabios entre las gamas de colores más cálidos para que no sea demasiado llamativo.

También puede usar un color en los labios que coinciden con la ropa. Si vas de negro, el color rojo y el marrón serán buenas elecciones. Si no quieres llevar pintalabios, asegúrate de que el color de tu cara es saludable y no tienes un aspecto enfermizo sin maquillar otras partes de tu rostro. Si la forma de tus labios no es muy clara, puedes usar perfiladores para hacerlos más llamativos. Sin embargo, debes ser consciente de los matices que utilizas.

Mejorar los párpados caídos


La falta de sueño, ciertas enfermedades o simplemente la herencia pueden hacer que tengamos los párpados caídos, lo que nos proporciona un aspecto cansado y somnoliento que nos resta vitalidad y juventud. Ya los tengamos así durante una corta época o se hayan instalado definitivamente en nuestro rostro debido al paso del tiempo, nuestro aspecto mejorará si logramos eliminar o al menos minimizar la caída de nuestros párpados.

Si el problema es ya muy pronunciado, podemos acudir a un quirófano a realizarnos una operación de blefaroplastia para eliminarlos. Pero hay muchas personas a quienes no les gustan los quirófanos o, simplemente no se pueden permitir el desembolso que ese tipo de operaciones requiere. Si este es tu caso, te dejamos una serie de trucos para conseguir que tus párpados caídos mejores su aspecto de una forma sana y natural.

En casa puedes hacer que tus párpados estén menos caídos aplicándote unos algodones empapados en infusiones como el té verde o el té rojo, que tienen propiedades antioxidantes y te ayudarán a rejuvenecer y mejorar tu aspecto. Al mismo tiempo tienes que mantener muy bien hidratada la piel del rostro.

Otro método que puedes practicar es masajearlos todos los días. Para ello debes cerrar los ojos y colocar los dedos índice y pulgar en el ángulo exterior del párpado. Después abre los ojos y, con los dedos, estira la piel hacia arriba y hacia abajo. Inhala y, cuando exhales el aire, intenta cerrar los ojos, aunque no podrás porque te estás sujetando los párpados. De este modo conseguirás que aumenten su elasticidad y se retraigan un poco hacia arriba.

También puedes acudir a otros tratamientos específicos como el drenaje linfático manual, que debe ser realizado por especialistas en la técnica, lo que ayudará a descongestionar tus párpados y hacer que se levanten.

Masaja facial anti-age


No es ningún secreto que la sabiduría milenaria de Oriente nos ayuda a mantener nuestra belleza. Tenemos a nuestro alcance muchas técnicas para rejuvenecer basadas en la medicina tradicional China y una de ellas es el masaje Qi Gong.

Este tipo de masaje actúa sobre los puntos de acupuntura tanto del cuerpo como del rostro estimulando y mejorando la circulación sanguínea. Con ello se oxigenan las células de la piel, al tiempo que se arrastran toxinas y se eliminan líquidos y grasas retenidos lo que proporciona a nuestra piel un efecto rejuvenecedor casi inmediato. Lo mejor es que no necesitas mucho tiempo y aplicado por la mañana en el rostro puede borrar los signos de cansancio y proporcionarnos un aspecto fresco y saludable.

Antes de comenzar debes realizar una serie de ejercicios de respiración para, de ese modo, relajar el cuerpo, lo que permitirá que el efecto del masaje sea mayor y ayuda a la mente a concentrarse. Inhala profundamente expandiendo el abdomen y exhala lentamente varias veces.

Para comenzar el masaje debes relajar los músculos del rostro. Para ello debes gesticular de modo exagerado, utilizando todos los músculos. Después, utilizando los dedos índice, medio y anular de ambas manos masajea las mejillas, primero hacia arriba y después en dirección a las orejas.

Con los dedos índice y medio masajea con un movimiento circular las sienes. No es necesario que hagas mucha presión para que el masaje sea efectivo.

Con la base de las palmas de las manos masajea la zona de las ojeras y las bolsas, comenzando al lado de la nariz y llegando hasta las sienes. Notarás cómo la circulación se estimula inmediatamente.

Para la parte final debes frotarte las manos hasta calentarlas y después golpear suavemente la piel de todo el rostro utilizando las yemas de los dedos para estimular el drenaje de los tejidos.

Consejos para depilar el labio superior


El labio superior es una zona delicada, ya que su piel es muy sensible. Por ello muchas mujeres, tras depilarse, presentan una rojez intensa en la zona, acompañada de granitos, debido a que no lo han hecho correctamente o a que han utilizado métodos demasiado abrasivos. Sin embargo, existen algunos trucos para lograr que esta depilación no sea dolorosa ni molesta.

Si tienes pocos pelitos y son largos, puedes usar sólo las pinzas depilatorias. Pero si tu vello es más intenso, lo mejor es utilizar la cera caliente, aunque con muchas precauciones para no quemar la piel. Recuerda que no debes tomar el sol después de haberte depilado esta zona al menos durante veinticuatro horas para evitar que la zona se queme y queden marcas.

Si optas por la cera, elige aquellas que se derriten a bajas temperaturas y sin bandas. De ese modo, el tirón será más suave y menos doloroso.

Para depilarte la zona debes comenzar limpiándola bien con un tónico o un limpiador facial para eliminar toda la suciedad de los poros. El siguiente paso es dividir el labio en dos partes, la derecha y la izquierda, y aplicamos la cera en la dirección del vello con el aplicador que viene en el envase de la cera.

Si utilizas bandas, debes cortarlas primero a la medida del área que quieras depilar, lo que te permitirá hacerlo con más precisión. Pégala sobre la cera y tira del extremo superior de la banda en un movimiento seco. No tires poco a poco, porque te dolerá mucho y no lograrás eliminar el vello. Si has optado por no usarlas, el procedimiento para retirar la cera es igual, tirando del extremo de la cera en la misma dirección.

Después utiliza alguna crema con efecto calmante, preferiblemente con aloe vera. De este modo la depilación te resultará más sencilla.

Costumbres que provocan arrugas


Con el paso del tiempo el colágeno y la elastina contenidos en las células de nuestra piel va desapareciendo, lo que hace que, poco a poco, vayan apareciendo arrugas. Pero no es sólo el tiempo el causante. Muchas veces, pequeños gestos a los que no prestamos importancia pueden ser los causantes de la aparición prematura de arrugas o aumentar las ya existentes. Por ello, si aprendemos a evitarlas nuestra belleza nos lo agradecerá.

Dormir boca abajo: Cuando dormimos en esta postura, la piel de la cara se aplasta contra la almohada o el colchón, soportando el peso de la cabeza y, a la larga, produce arrugas tanto en el rostro como en el cuello, que suele estar en mala posición.

Restregarnos la piel al aplicar las cremas: Es un gesto que hacemos a diario y, sobre todo en el movimiento que hacemos recorriendo los pómulos hasta las sienes, solemos hacer mucha presión, arrugando la piel a la altura de los ojos y en las sienes. A la larga, este gesto repetido provocará el aumento de las patas de gallo. Por ello no debemos nunca restregar la piel, sino aplicar la crema suavemente con pequeños toquecitos que estimulen el riego sanguíneo de la zona.

Sujetar el teléfono entre el cuello y la cara: Lo hacemos todos los días y de modo inconsciente para, de ese modo, tener libres las manos. Aparte de ser una postura muy perjudicial para el cuello que nos puede causar dolores y tensión en las cervicales, la piel del cuello se contrae y se arruga, con lo que se acentúan las arrugas ya existentes.