Aunque hayamos utilizado correctamente el protector solar durante las horas de exposición al sol, en verano suele ser normal que, al cabo de unos días, nuestro rostro se termine cubriendo de pequeñas manchas producidas por la acumulación de melanina en determinados puntos de la piel. Si son pequeñas nos puede dar un aspecto gracioso, pero si son más grandes nuestro rostro adquiere un aspecto moteado que no resulta muy estético. Por ello te dejamos una serie de consejos para eliminarlas.
Si las manchas no son excesivamente oscuras, puedes seguir tomando el sol, pero teniendo cuidado de aplicar un protector solar de la protección más alta en las zonas donde se acumulan las manchas, para que su tonalidad no se intensifique. También es buena idea beber cada día un zumo a base de zanahorias porque su contenido en beta carotenos estimula la producción de melanina, lo que contribuirá a que nuestro moreno se vaya armonizando.
Si las manchas son muy oscuras, lo más aconsejable es utilizar cremas despigmentantes, que, poco a poco irán eliminando las manchas de tu rostro, aunque el proceso tardará varios meses, por lo que deberás tener paciencia y ser constante en la utilización del producto.
Si quieres acelerar la desaparición de las manchas lo mejor es acudir a un centro de estética donde puedas recibir alguno de los tratamientos para las manchas.
Podemos destacar de entre estos tratamientos es la aplicación de la luz pulsada intensa o IPL, que consiste en aplicar un gel frío en la zona manchada para después disparar sobre ella luz por un periodo entre treinta minutos y una hora, dependiendo de la intensidad de las manchas. Para lograr una eliminación total de las mismas, harán falta entre tres y cinco sesiones.